viernes, octubre 06, 2006

Desierto: ¿hogar dulce hogar?

Los desiertos nos causan respeto, sentimos pena por los hombres que han de vivir en él y se nos nubla la vista de tan solo ver los documentales que hablan sobre las escalofriantes situaciones que soportan las especies que los habitan.


Aproximadamente un tercio de la superficie de la Tierra está cubierta por desiertos. Excepto Europa, todos los continentes tienen alguno. Para vivir en un desierto tienes que ser un organismo muy adaptado, nadie, absolutamente nadie, bien sea persona, planta, animal y prácticamente cualquier ser microscópico alóctono de ese ecosistema podría sobrevivir a las condiciones climáticas propias del desierto.

Quizá te ha entrado sed de recordar imágenes de zonas tan extremadamente áridas, donde el régimen de precipitaciones roza los 0mm anuales, sin embargo en ningún momento he mencionado que un desierto es un lugar donde hace un calor insoportable. De hecho, como acabo de decir, las zonas muy áridas con precipitaciones casi nulas son consideradas desiertos. Esto incluye por supuesto, los desiertos “típicos”, pero también los desiertos polares.


Los organismos que habitan en estos lugares tienen características conseguidas mediante la evolución, adaptaciones fisionómicas espectaculares, tanto la flora como la fauna. Pero antes de ver algún ejemplo, hay que conocer más a fondo las características de estos tipos de desiertos.

Características comunes:
  • Menos de 250mm anuales de precipitación.
  • Períodos de sequía prolongados, incluso más de 12 meses.
  • Altas presiones que evitan la condensación del agua.

Desiertos típicos:
  • Elevada evapotranspiración.
  • Diferencias térmicas entre día y noche de más de 50ºC.
  • Alta insolación debido a la ausencia de nubes.

Desiertos polares:
  • Temperatura media del mes más cálido de 10ºC.
  • Agua en estado sólido, no hay humedad en el ambiente.
  • Gelifracción, el agua solidifica, aumenta de volumen y provoca fracturas.

Realmente son condiciones muy duras, por ello vamos a desvelar los secretos de los organismos que consiguen sobrevivir de forma espectacular:

Flora en desiertos típicos:
El agua es un bien tanto escaso como necesario, hay que conseguir que la poca agua absorbida no se pierda por evapotranspiración, por ello la superficie expuesta a la grave insolación es mínima. Las hojas pasan a ser pinchos y la estructura se recubre con sustancias impermeables.

Realizan la fotosíntesis de forma inversa a las plantas normales, se denominan plantas CAM (Crassulean acid methabolism). Estas plantas realizan el intercambio gaseoso por la noche, para evitar pérdidas de humedad, mientras que por el día cierran sus estomas (aperturas para el intercambio de gases). Estas plantas son muy especiales, el ejemplo más conocido es el del cactus, sin embargo hay plantas espectaculares como la Welwitschia (foto de abajo), especie endémica del desierto de Namibia con una estructura insólita, solo propia de su especie.


Flora en desiertos polares:
Las condiciones no son menos duras que en los desiertos calurosos, tan solo 350 especies, la mayoría líquenes, musgos y algas, logran sobrevivir a sus dificultades. ¿Qué método se usa para evitar que se congele el agua del interior de la planta, cómo se hace la fotosíntesis con noches que duran meses, y cómo se absorbe el agua si solo hay hielo? Tan solo algunas especies herbáceas, aparte de los organismos previamente dichos, logran sobrevivir.



Fauna en desiertos típicos:
La mejor táctica es esconderse, evitar la exposición al exterior. Existen pequeños reptiles que se refugian en la arena durante el día, aunque la fisionomia de alguno de ellos es espectacular, como la de este largarto espinoso. También hay serpientes y sobretodo, muchos artrópodos. El clásico escorpión y especies arácnidas podrían ser buenos representantes.



Fauna en desiertos polares:
Pingüinos, focas y osos polares son los animales que nos vienen a la mente instantáneamente, y todos coinciden en un aspecto, su buena capa de grasa que les aísla del frío. Intensas matas de pelo ayudan a los zorros polares en sus largas travesías en busca de alimento.

Después de haberos mostrado un poco más de cerca estos inhóspitos lugares de nuestro mundo, os dejo un par de vídeos, el primero es de un lagarto rosa del desierto de Namibia, la toma está realizada por la noche ya que por el día minimizan su actividad. El segundo video es una pareja de osos polares caminando uno al lado del otro. En la inmensidad de los desiertos, no está de más tener algo de compañía.